Voluntariado
El voluntariado constituye una parte fundamental de AECUM. Cuando nos referimos a ell@s, hablamos de un trocito del pilar base de la asociación. Son personas que suman a la vida, y mejoran “la calidad de vida de aquell@s a l@s que acompañamos”.
Hablamos de Pasión, Ganas, Lealtad y Cariño por lo que se hace.
La asociación no contempla su crecimiento sin los grupos de voluntariado, ellos dan un brillo especial y proporcionan soporte, entre otras, a las salidas de ocio, de difusión e información, de recaudación de fondos, etc.
Ser voluntari@ es querer dedicar una parte de tu tiempo a ayudar a otras personas, querer comunicarte y formar parte de los momentos de aquell@s que tienen alguna dificultad. En ocasiones vemos una realidad dura, nos apenamos y miramos a otro lado porque no estamos preparados o no queremos implicarnos en algo. La persona voluntaria toma conciencia y da el paso. En AECUM, se les forma para tener herramientas y estrategias en la interacción con las familias y personas que han sufrido un daño cerebral.
Ell@s atienden, escuchan, comprenden y toman en consideración a las personas que sufren DCA y sus vivencias.
El Voluntariado quiere intentar dar sentido a la vida, quizás a veces dolorida después de muchos avatares y luchas. Todos somos capaces de transmitir algo y todos podemos aprender algo. Este es nuestro punto de encuentro. En esto coincidimos y nos cruzamos todos, en el caminar de la vida. El voluntariado propicia, entre otras cosas, este encuentro entre situaciones vitales de personas.
Para ello, nuestros voluntarios han sido formados por parte de los terapeutas de manera que puedan comprender las dificultades que se presentan y sepan responder de manera correcta ante ellas. Por ejemplo desde el área de fisioterapia y terapia ocupacional, se les enseña cual puede ser la mejor posición para ayudar a las personas con una hemiparesia o personas con alteración de la marcha. Igualmente, desde el área de neuropsicología se les orienta sobre los procesos cognitivos y como se pueden encontrar alterados, para que sepan los diferentes perfiles que podrán encontrarse y sepan tener la paciencia y la bondad de entenderlos (emoción, conducta y cognición). Finalmente, desde el área de logopedia se les formará sobre lenguaje, habla, alimentación y voz, mostrando las herramientas necesarias para una comunicación eficaz y constructiva en la que no haya momentos para la frustración, si no para el aprendizaje.
Además, desde AECUM creemos que es fundamental la cercanía, la escucha y la empatía.
No importa la edad, la experiencia o la raza, ser voluntario no entiende de fronteras. La única barrera que impide hacerse voluntario es la del querer, es la del dar el paso o no darlo.
Si tienes ganas y quieres aportar ese granito de arena que tanto se necesita en la sociedad de hoy en día, no dudes en contactar con nosotr@s, estaremos encantad@s de tenerte en el equipo, de formarte y mostrarte una realidad desconocida para mucha gente y que necesita de ti. AECUM te espera.
¡Apúntate!